El preservativo es el método anticonceptivo para hombres más utilizado en la actualidad, y también uno de los pocos que existen.
En cambio, las mujeres pueden elegir entre una gran variedad de alternativas. ¿Conoces los anticonceptivos femeninos que existen? Sigue leyendo si quieres saber cuál es el más indicado para ti.
¿Qué son los métodos anticonceptivos?
Los métodos anticonceptivos son aquellos que impiden o reducen significativamente las posibilidades de una fecundación o un embarazo en las relaciones sexuales.
Para escoger un método anticonceptivo hay que tener en cuenta cuál se adecua mejor a la forma de vida y las condiciones personales de salud.
Por esta razón es conveniente acudir a un profesional que valore tu caso particular y te asesore.
Hay que tener en cuenta que la efectividad está asociada principalmente con que el método elegido sea el adecuado a tus características personales y estilo de vida.
Tipos de anticonceptivos femeninos
A la hora de hablar de los anticonceptivos femeninos hay que diferenciar entre 3 tipos.
- Anticonceptivos no hormonales o de barrera: este tipo de métodos anticonceptivos protegen del embarazo y también de enfermedades de transmisión sexual o infecciones. Son el tipo más habitual de anticonceptivos sin hormonas para mujer y consisten en impedir físicamente que los espermatozoides lleguen al óvulo.
- Anticonceptivos hormonales: su principal objetivo es evitar que la mujer ovule para impedir así la posibilidad de la fecundación. Se componen de hormonas femeninas: los estrógenos y progesterona.
- Anticonceptivos permanentes: son métodos 100% fiables, pero que requieren de una intervención quirúrgica.
Anticonceptivos femeninos no hormonales
- Preservativo femenino: es uno de los métodos anticonceptivos menos conocidos, pero también el único de uso femenino que previene embarazos no deseados y protege de enfermedades de transmisión sexual. Se introduce en la vagina y puede colocarse hasta 8 horas antes de tener relaciones. Además, ofrece protección inmediata sin perder la sensibilidad.
- Diafragma: consiste en un anillo flexible, envuelto en una capa fina de silicona o goma, que cubre el útero. La función de este método anticonceptivo es evitar que los espermatozoides entren al útero para la fecundación del óvulo.
- Esponja vaginal: es un dispositivo de espuma de poliuretano con espermicida. Solo se debe retirar después de pasadas 6 horas desde la última relación sexual.
- DIU de cobre: se trata de un pequeño dispositivo de cobre con forma de T que se inserta en el útero. Es un método anticonceptivo que no desprende hormonas, ya que el cobre cambia el moco cervical, lo que dificulta que los espermatozoides lleguen al óvulo y sobrevivan. Una vez implantado mantiene su efectividad del 99% durante unos 10 años.
Anticonceptivos femeninos hormonales
- Píldora: la píldora anticonceptiva se toma de forma regular por vía oral y suele ser combinada, es decir, está compuesta principalmente por dos hormonas, un estrógeno y un progestágeno. Este anticonceptivo debe ser recetado por un médico, quien debe comprobar previamente que no existe ninguna contraindicación para su uso. Se trata de un método muy fiable para evitar los embarazos no deseados, ya que su eficacia se ha estimado en un 99% con un uso perfecto y un 91% con el uso habitual. Es importante tomarla a diario y siempre aproximadamente a la misma hora.
- Anillo vaginal: es un anillo flexible, transparente y casi incoloro que se coloca en la vagina al comenzar el ciclo menstrual y que durante 21 días libera una pequeña cantidad de hormonas femeninas. Una vez pasadas las tres semanas, hay que retirarlo y esperar una semana –periodo durante el cual se tiene la menstruación– para colocarse otro nuevo. Si se usa correctamente, su nivel de efectividad para impedir el embarazo es del 99%. Su ventaja es que no tendrás que estar diariamente pendiente de él como en el caso de la pastilla anticonceptiva.
- Parche hormonal: son unos pequeños parches que se colocan en los glúteos, abdomen, parte superior de la espalda o en el brazo que van liberando de forma continua una dosis hormonal. Se debe sustituir cada 7 días.
- DIU hormonal: el dispositivo es una estructura de plástico en forma de T que se inserta en el útero, donde libera un tipo de hormona progestina. Su uso es recomendado para mujeres que ya han sido madres.
- Implante anticonceptivo: es una varilla plástica flexible que se coloca debajo de la piel en la parte superior del brazo. En el dispositivo va la dosis hormonal necesaria para que no se produzca la ovulación. Puede durar entre tres y cinco años y tiene una alta eficacia anticonceptiva frente a los embarazos.
Anticonceptivos permanentes
Ligadura de trompas: las trompas de Falopio se cortan, ligan o bloquean para evitar el embarazo de forma permanente.
Esta ligadura evita que el óvulo se traslade desde los ovarios a través de las trompas de Falopio y bloquea el recorrido del esperma hacia arriba de las trompas de Falopio hasta el óvulo.
El procedimiento no afecta el ciclo menstrual. Se realiza con intervención quirúrgica o por vía endoscópica, y debes tener en cuenta que este tipo de cirugías son métodos muy drásticos y debes estar muy segura de que no querrás tener hijos en el futuro.
Ahora ya sabes cuáles son los principales anticonceptivos femeninos si quieres evitar un embarazo. Pero también son muchas las mujeres que están deseando ser madres y no pueden de forma natural.
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