La anovulación es una de las causas principales de la infertilidad femenina, y aunque es un proceso que el cuerpo realiza de forma natural en periodos como el embarazo o la lactancia, puede suponer un problema cuando se da fuera de estas dos etapas:
Qué es la anovulación
La anovulación es cuando los ovarios de la mujer no son capaces de liberar ningún óvulo durante el ciclo menstrual, es decir, la ovulación no se produce en ningún momento, imposibilitando el embarazo.
También cabe recalcar que la anovulación no tiene por qué ser crónica, y puede darse solo en determinados momentos por problemas hormonales, como sucede por ejemplo en el síndrome de ovarios poliquísticos (SOP). No obstante, cuando la anovulación es crónica puede derivar en otras alteraciones de salud como la diabetes mellitus 2, por lo que es algo que conviene conocer y tener controlado.
Causas de la anovulación
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) tanto las causas de la anovulación como de otros trastornos ovulatorios generales pueden clasificarse en tres grandes grupos:
Grupo I: Fallo hipotalámico-hipofisario
Se estima que esta es la causa de aproximadamente el 10% de las disfunciones ovulatorias, y consiste en la falta de secreción de GnRH y gonadotropinas (FSH y LH) por parte del hipotálamo y la hipófisis respectivamente.
Estas son las hormonas encargadas de controlar el ciclo menstrual e inducir al desarrollo folicular en los ovarios, por lo que al no estar presentes, la ovulación no se produce.
El correcto funcionamiento del hipotálamo y la hipófisis puede alterarse por diversos factores, entre los que se incluyen:
- Exceso de ejercicio físico.
- Hipogonadismo hipogonadotrópico.
- Enfermedad genética conocida como “Síndrome de Kallman”.
- Cambios bruscos de peso, sobre todo en casos de anorexia o bulimia.
- Enfermedades sistémicas, como las que afectan al hígado o al riñón.
Grupo II: Alteraciones hormonales
Dentro de las alteraciones hormonales más comunes en los casos de anovulación encontramos diversas causas:
- Síndrome de ovarios poliquísticos (SOP): se estima que causa hasta el 80% de los casos de anovulación por alteraciones hormonales. Este síndrome es en realidad un trastorno endocrino que provoca ovarios agrandados con folículos en la periferia que nunca llegan a madurar. Su principal síntoma es la falta de menstruación (amenorrea) y las reglas irregulares.
- Hiperprolactinemia: Un aumento anormal de la hormona prolactina.
- Trastornos de la tiroides: Como hipertiroidismo e hipotiroidismo.
Grupo III: Fallo ovárico
Esto sucede cuando los ovarios de la mujer dejan de funcionar sin haber alcanzado los 40 años de edad, se le conoce como insuficiencia ovárica precoz (IOP) y se estima que supone del 4 al 5% de los trastornos ovulatorios.
Se produce cuando existe una falta de estrógenos y aunque los niveles de hormonas hipofisiarias sean elevados, los ovarios son incapaces de responder.
Síntomas de anovulación
El principal síntoma de la anovulación es la ausencia total de menstruación, conocida como amenorrea, aunque también pueden darse periodos irregulares y sangrados anormales.
Otras características que presentan las mujeres que no ovulan es la ausencia del síndrome premenstrual y la falta del moco cervical elástico, transparente y abundante que se presenta en la ovulación y sus días previos. Tampoco se suelen experimentar cambios en la temperatura basal.
Diagnóstico
Si bien la anovulación tiende a presentar alguno de los síntomas anteriores, no siempre es así, las mujeres pueden tener reglas regulares y no ser conscientes de que no ovulan hasta el momento de intentar concebir.
Cuando no se produce el embarazo y se sospecha de que la anovulación puede ser la causa, puede confirmarse o descartarse mediante:
- Un test de ovulación.
- Análisis de sangre para medir los niveles de progesterona.
- Visita al ginecólogo.
Si tras las pruebas de diagnóstico se confirma que la mujer no está ovulando, será necesario comenzar con un tratamiento si se desea corregir el problema:
Tratamientos para la anovulación
Implementación de hábitos saludables
Cuando la anovulación no está causada por problemas graves puede corregirse implementando hábitos saludables como una dieta sana, ejercicio físico moderado y estrategias para afrontar el estrés y la ansiedad.
Tratamientos para la tiroides
Si la anovulación sucede por trastornos en la glándula tiroides, será necesario corregir previamente estos trastornos.
Inducir la ovulación
En casos de anovulación crónica será necesario inducir la ovulación mediante fármacos hormonales recetados, también puede ser necesaria la intervención quirúrgica.
¿Puedo donar óvulos si padezco de anovulación?
Muchas mujeres que padecen anovulación ocasional o con tratamiento, se han convertido en donantes de óvulos por ser ellas, precisamente, quienes mejor conocen la ansiedad por no poder convertirse en mamás.
Ahora bien, a la hora de convertirte en donante debes pasar por unas pruebas médicas y psicológicas donde el equipo médico se reserva el derecho de admitir o no a la donante, de esta manera, nos aseguramos de que la persona está preparada para vivir el proceso de donación de manera llevadera y relajada.
Si padeces anovulación y quieres donar óvulos, lo mejor es consultar lo antes posible con Fertilab Donantes, nuestro equipo resolverá todas tus dudas y te guiará de manera respetuosa, cálida y respetando siempre tu privacidad.